Terapia infantil y para adolescentes online

La terapia puede ser beneficiosa en muchos momentos, no sólo cuando hay un problema grave. Algunas señales de que puede ser útil:

• Cambios de humor frecuentes o intensos

• Ansiedad, miedos o fobias

• Problemas en la escuela o con el rendimiento

• Dificultades para relacionarse o comunicarse

• Separación de los padres o duelo

• Baja autoestima o inseguridad

• Conductas agresivas o impulsivas

• Aislamiento social o tristeza prolongada

Las sesiones se realizan por videollamada, en un entorno cuidado y adaptado a su edad. El terapeuta puede trabajar con juegos, dibujo, metáforas, conversación o técnicas específicas, según la edad y las necesidades.

El acompañamiento incluye también orientación a las familias: sois una parte fundamental del proceso.

Según la etapa evolutiva, pueden emplearse herramientas como:

• Terapia cognitivo-conductual adaptada

• Terapia de juego

• Mindfulness y regulación emocional

• Psicoeducación y habilidades sociales

• Trabajo con la familia o la escuela, si es necesario

La terapia infantil puede comenzar desde los 4 o 5 años, dependiendo del desarrollo del niño y la situación concreta. A estas edades, el trabajo terapéutico se realiza a través del juego, los cuentos, el dibujo o actividades simbólicas, ya que es su manera natural de expresarse.

En la adolescencia, en cambio, se utilizan técnicas más verbales, centradas en la reflexión, la gestión emocional o las habilidades sociales.

Cada etapa tiene sus propias necesidades, y el terapeuta adapta las herramientas para conectar con el menor y acompañarlo de forma efectiva.

La implicación de la familia es esencial en cualquier proceso terapéutico infantil o juvenil. Aunque el trabajo principal se hace con el niño o adolescente, el entorno familiar influye directamente en su bienestar emocional.

Por eso, el terapeuta suele mantener una comunicación activa con los padres o tutores: les orienta sobre cómo manejar ciertas situaciones, cómo establecer límites saludables, o cómo mejorar la comunicación en casa.
La familia no sólo apoya, sino que también puede transformarse junto al menor durante el proceso terapéutico.

Cada niño y adolescente es único, pero hay señales que pueden indicar que algo no va bien. Por ejemplo, cambios repentinos en el estado de ánimo, dificultades para dormir, bajada en el rendimiento escolar, aislamiento, rabietas intensas, tristeza prolongada, ansiedad o miedo constante, entre otros.

También puede ser útil buscar apoyo si ha habido situaciones difíciles en casa (divorcio, pérdidas, mudanzas, etc.). Si tienes dudas, lo mejor es realizar una primera sesión con un profesional.
En ContigoPsi ofrecemos una sesión gratuita para valorar si la terapia es necesaria y cómo puede ayudar.

Sí, numerosos estudios respaldan la eficacia de la terapia psicológica online en niños y adolescentes.
Una investigación publicada en Elsevier concluyó que las intervenciones psicológicas realizadas por internet tienen efectos significativos en la reducción de síntomas depresivos y efectos moderados en la mejora de la ansiedad y el funcionamiento social en jóvenes. Este estudio muestra que las intervenciones en línea son una opción válida para tratar la ansiedad y depresión en niños y adolescentes, con resultados comparables a los tratamientos tradicionales.

Un equipo especializado

Nuestros psicólogos cuentan con experiencia en infancia y adolescencia, además de formación específica en enfoques actualizados. Están colegiados y comprometidos con un trato respetuoso y empático.